Imagen del marcador al finalizar la Marató del año pasado. Foto: TV3.
Unas horas después de cerrada la edición 2011, la recaudación ya ha superado los siete millones y medio de euros, continúa hasta el 31 de enero, un periodo que el año pasado permitió recoger un millón y medio más, hasta los 8.735.103 euros del balance final. La 20ª edición de 'La Marató' cerró 15 horas de programa con una recaudación de 7.231.628 euros, una cifra que roza el récord que se marcó el año pasado, con 7.246.114 euros.
Con una media ligeramente superior a 1 euro por ciudadano, la Marató de TV3 queda muy encima de otras teletón que se hacen en el mundo, aunque tiene el referente de la Telethon francesa, con aproximadamente 1,7 € por ciudadano. La principal Telethon española la hace Antena 3 con una recaudación de 0,02 por ciudadano.
La dureza de la crisis que se está viviendo en Cataluña, que las familias están notando con el 20% de paro y con los ajustes de la administración pública, hace que esta gran muestra de solidaridad aún tenga un valor mucho mayor.
Como cada año, el país entero se implicó con la recogida de fondos, que en esta ocasión iban destinados a la investigación del trasplante de órganos y tejidos, con la colaboración de muchas entidades, ayuntamientos, empresas, profesionales, y el testimonio de muchas personas que han sobrevivido gracias a donaciones de órganos. En una época donde hay menos dinero que nunca, ha alcanzado una cifra que demuestra que los catalanes confían en esta apuesta de la televisión pública, Televisió de Catalunya, que ya suma más de 20 años de vida. A lo largo de estos años se han conseguido cerca de 100 millones de euros para mejorar la situación de personas que padecen enfermedades diversas.
Como nota curiosa, Cataluña pierde en las 15 horas que duró el programa el triple de dinero que se recaudó con La Marató. Efectivamente, durante estas mismas 15 horas, estos mismos catalanes envían al Estado español 27 millones euros en impuestos que nunca les serán devueltos, de acuerdo con un 8,4% de déficit fiscal sobre el PIB catalán, unos 16.500 millones de euros anuales que serían inaceptables en los estándares de cualquier país democrático. Es dinero que damos al Estado sin recibir absolutamente nada a cambio, es decir, cada ciudadano de Cataluña paga anualmente en España € 2.200 sin recibir a cambio ningún tipo de servicio ni de prestación.
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