31.5.15

Cambiar las definiciones del diccionario por intereses políticos

[ca] Canviar les lleis sobre la marxa, "enmig del partit", és una pràctica de mal govern. L'estat espanyol mostra estar fora del món occidental quan actua així, com per exemple amb lleis retroactives que van penalitzar les inversions en renovables. El que algunes persones desconeixen és que entre les estratagemes de l'estat espanyol per a articular la seva política de baixos fons també hi cap el canvi de les definicions del diccionari, com es mostra en aquest article. I és que sols a Espanya pot passar que els parlaments governats per nacionalistes espanyols decideixin fins i tot sobre les llengües, en contra dels criteris filològics i científics internacionals, en una actitud medieval allunyada segle XXI. Els llatinoamericans haurien de ser coneixedors de com es manipula la seva llengua amb nocturnitat, per part dels qui pensen que la llengua és propietat seva mentre que els llatinoamericans són parlants de segona.


[es] Cambiar las leyes sobre la marcha, "en medio del partido", es una práctica de mal gobierno. El estado español muestra estar fuera del mundo occidental cuando actúa así, como por ejemplo con leyes retroactivas que penalizaron las inversiones en renovables. Lo que algunas personas desconocen es que entre las estratagemas de España para articular su política de bajos fondos también cabe el cambio de las definiciones del diccionario, como se muestra en este artículo. Y es que sólo en España puede pasar que los parlamentos gobernados por nacionalistas españoles decidan incluso sobre las lenguas, en contra de los criterios filológicos y científicos internacionales, en una actitud medieval alejada del siglo XXI. Los latinoamericanos deberían ser conocedores de cómo se manipula su lengua con nocturnidad, por parte de los que piensan que la lengua es de su propiedad mientras los latinoamericanos son hablantes de segunda.



Todo sobre las enmiendas del DRAE2014 contra el proceso catalán

En esta entrada, ofrecemos al lector una recopilación de las publicaciones en medios e instituciones catalanes, vascos y uruguayos sobre las enmiendas en la ya nueva edición del Diccionario de la lengua española (DRAE2014), deliberadamente realizadas por la RAE (al parecer, sin contar con el debido consenso interacadémico) para servir a los tribunales de justicia españoles contra el proceso soberanista catalán, una utilidad que probablemente ha motivado que, de manera inusitada en la historia de la institución, la RAE haya avanzado la publicación del DRAE sobre la fecha prevista.

No olvidemos que el DRAE ha sido utilizado en múltiples ocasiones también por el Tribunal Constitucional español para dirimir el sentido propio de palabras clave (sean términos comunes o especializados) en el cuerpo legal o en una causa. En 1989, por poner un solo ejemplo, el DRAE sirvió al Tribunal Constitucional para dictar una resolución a favor del Gobierno central en una litigio competencial con la Generalitat de Cataluña, gracias a su uso para esclarecer el sentido literal de competencia participativa.

Así pues, una vez suspendidos cautelarmente por el Tribunal Constitucional español la ley catalana de consultas populares no refrendarias y el decreto de convocatoria de una consulta no vinculante de autodeterminación en Cataluña, prevista para el 9 de noviembre de este año, el DRAE es el instrumento auxiliar que faltaba para el bloqueo legal del proceso catalán que la maquinaria del Estado español ha puesto en marcha con también inusitada urgencia.

Las enmiendas aludidas afectan a las siguientes baterías de términos:

1. Términos político-jurídicos:

administración, autodeterminación, autodeterminista, autogobierno, ciudadano, consulta popular, democracia (y subentrada democracia directa), estado (y subentradas E. asociado, E. autonómico, E. de derecho, E. federal, e. de alarma, e. de excepción, e. de guerra, e. de sitio), mayoría silenciosa, plebiscito, referéndum, soberanía, soberanía nacional y somatén

2. Términos relacionados con los conceptos de nación, de patria, de patriotismo y con la tipología de nacionalismos:

argentinismo, argentinidad; bolivianismo, bolivianidad; chilenismo, chilenidad; colombianismo, colombianidad; costarriqueñismo, costarriqueñidad; cubanismo, cubanidad; dominicanismo, dominicanidad; ecuatorianismo, ecuatorianidad; españolismo, españolidad; filipinismo, filipinidad; guatemaltequismo, guatemalidad; hondureñismo, hondureñidad; mejicanismo, mejicanidad; mexicanismo, mexicanidad; nicaraguanismo, nicaraguanidad; panameñismo, panameñidad; paraguayismo, paraguayidad; peruanismo, peruanidad; puertorriqueñismo, puertorriqueñidad; salvadoreñismo, salvadoreñidad; uruguayismo, uruguayidad; venezolanismo, venezonalidad, aberzale/abertzale; antiespañol; antiespañolismo; antiespañolismo; homogeneizador y nacionalismo.



Todos los periodistas, académicos de la Secció Filològica del Institut d'Estudis Catalans y lingüistas que firman las entrevistas, los artículos y las ponencias siguientes han sido calificados por el director de la RAE, don José Manuel Blecua, de «lenguas viperinas» en la rueda de prensa de presentación del acelerado DRAE2014, al tiempo que enfatizaba su preferencia por la palabra libertad, porque, a su particular entender, está «regida por la ley», se supone que la española:
Silvia Senz en 17:14
miércoles, 1 de octubre de 2014
Font: http://addenda-et-corrigenda.blogspot.com