Tuve que comprar un billete sencillo y me extrañó la lentitud y colas en las máquinas. Pero
aún más lento fui yo cuando vi que resulta que para comprar un simple
billete tienes que hacer constar hasta qué estación viajes.
Además de la complicación de este mecanismo, me pregunto qué pasa si
cuando ya estoy dentro, recibo una llamada que me obliga, por ejemplo, a
bajar un par de paradas después. ¿Cometeré una ilegalidad? ¿No podré salir? ¿Me pueden detener y vilipendiar por ser un mal ciudadano? ¿Debería decírselo al primer vigilante que encuentre? ¿Tendré que comprar un billete complementario? ¡Bestial!
Pero encima, resulta que en el billete no consta el importe que has
pagado, por lo que no puedes llevar el control de gastos, o facilitar
que te devuelvan el importe o ponerlo como gasto profesional.
Si tienes paciencia -sólo por curiosidad- y miras en el
web para encontrar cuál es el importe, te das cuenta de lo complicado.
Tienes
que saber en qué zona corresponde el recorrido que has hecho, y luego
tienes que contar en cuántas paradas has excedido entre 5 y 10, que es
el rango en el que el precio varía. Supongo que la gente del
pueblo deben tenerlo controlado pero para los forasteros es una
collonada provinciana y burocrática. Y no sé si ilegal... porque ¿pueden venderme un servicio y no darme un recibo de cuando he pagado?
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