Aún las lavadoras más eficientes del mercado consumen una enorme cantidad de energía y agua, especialmente con programas de agua caliente. Este revolucionario concepto del diseñador Elie Ahovi podría acabar con esto.
La lavadora Orbit cambia el agua y el detergente por el poder limpiador del hielo seco, además de ser más silenciosa y rápida en el lavado.
Consiste de un anillo repleto de baterías a través del cual fluye la corriente eléctrica. El tambor esférico, que contiene la ropa sucia, está hecho con un metal superconductor enfriado a muy bajas temperaturas con nitrógeno líquido. Como su resistencia eléctrica es cercana a cero, el tambor flota en el interior del anillo.
Pero es dentro del tambor donde se produce el milagro de la ciencia. El hielo seco, el nombre que recibe el dióxido de carbono en estado sólido, se sublima (se convierte directamente en gas sin pasar antes por el estado líquido) y se lanza a gran presión sobre la ropa sucia. El CO2 reacciona con la suciedad y la grasa eliminándolas de la ropa.
Como el proceso depende de una reacción química casi instantánea, el tiempo de limpieza se acorta considerablemente. La Orbit requiere un poco de mantenimiento para que se pueda eliminar la suciedad aislada. El sistema que contiene el CO2 se trata de un circuito cerrado, por lo que no necesita ser reemplazado. Las pilas del anillo se auto recargan por inducción capturando la energía del giro del tambor.
Vía :: Treehugger
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