3.3.11

La responsabilidad social como inherencia, no sólo coherencia!


Traducción del artículo que publiqué en Xarxanet.org sobre el sentido de la responsabilidad social para las organizaciones


Se han destinado muchas horas, muchas jornadas, muchas comisiones, muchos escritos ... a definir el concepto de responsabilidad social de las empresas, de manera que no quisiéramos darle más dedicación. Pero es que nunca me había encontrado que me pidieran definir la RSE con una palabra. ¡Todo un reto!

Sucedió en el marco de la mesa redonda que organizó FEAPS este noviembre en Madrid. De hecho, me habían pedido de iniciar las intervenciones haciendo una definición en términos clásicos, en la que, según la transcripción resumida, dije esto:
¿Qué es la Responsabilidad Social Corporativa? Josep Maria Canyelles: Es un estilo de gestión mediante el cual la organización intenta hacer las cosas bien y buscar una excelencia social y se concreta en ser sensible a las inquietudes de la sociedad y además esto es buenísimo para la organización porque le da solidez interna, más confianza, más proximidad con los públicos de interés, etc. Cuando una empresa u organización está aportando realmente valor, lo debe integrar en la gestión, que surja como su manera de hacer las cosas.
Pero al final quisieron rematar la faena: Si tuvieras que definir la RS en una sola palabra, ¿qué utilizaríais?

Y me salió inherencia, sin tener la certeza de que formara parte del diccionario, pero con la seguridad que era un derivado bien formado a partir de inherente.

Mi respuesta salió de manera espontánea, pero recogiendo una lógica del discurso que había ido articulando y que intento reproducir a continuación.

El evento la organizaba una entidad sin ánimo de lucro, por lo que también abordaba el reto de la RSO, es decir, la responsabilidad social de las ONL. En otras ocasiones ya nos hemos manifestado críticos cuando alguien argumenta que las ONL también deben incorporar la RS por motivos de coherencia. Nos parece un motivo insuficiente. Es evidente que la coherencia con el discurso que muchas ONL tienen las debería llevar a gestionar su RS, pero mi punto de vista es que, si solo lo hacen por coherencia, poco van a hacer!

Para que una ONL gestione a fondo su RS es necesario que se lo crean y que, además, estén convencidos de que les reportará un retorno. Es más, que lo entiendan como una necesidad estratégica.

Hoy en día, en un entorno de alta competitividad  -¡también en el sector no lucrativo!-,  algunas ONL buscan oportunidades de colaboración empresarial apuntando hacia lo que podríamos catalogar como colaboraciones estratégicas empresas-ONL. Remarco la palabra estratégicas en el sentido de que no son puntuales sino a largo plazo, en el sentido de que no son meramente departamentales u operativas sino corporativas, pero sobre todo en el sentido de que están concebidas desde la confianza mutua y con la voluntad de crear valor compartido. Cuando una organización aspira a partenariados o modelos colaborativos de esta profundidad debe saber que sin una gestión cuidadosa de su RS no estará creando las condiciones de confianza necesaria en sus partners.

La RSO es, entonces, un modelo necesario para desarrollar relaciones estratégicas entre ONL y empresas. Para ir más allá de los modelos puntuales de mecenazgo, o para superar relaciones operativas o departamentales, y para construir relaciones de confianza corporativa y no meramente interpersonal.

Dicho de otro modo  -¡y sin complejos!- la RSO, como la RSE, también debe tener un sentido útil, instrumental. También debe tener este sentido útil porque de lo contrario lo que haremos será muy poco. Lo mínimo. Algunos elementos de transparencia... Algunos elementos de mejora del impacto ambiental... Algunos elementos de buen gobierno... Sin profundizar mucho porque el día a día no nos lo permite...

Pero este sentido positivamente instrumental, debe ir junto a una convicción de que el buen gobierno, la sostenibilidad o los mejores impactos hacia la comunidad, por ejemplo, forman parte de nuestra manera ética de entender la presencia en el mercado y en la sociedad. Por tanto, sí que tenemos que ser coherentes, pero la RSO  -y más en el caso de las ONL-  debe ser inherente a nuestra manera de ser y de hacer.

La coherencia implica que la responsabilidad social sería como algo externo, sobrevenida, colateral, que tenemos que hacer que vibre con la misma intensidad de onda que los valores internos, debemos hacer que sea co-coherente. Voy más allá: la RSO debe ser in-inherente a nuestra institución.

La coherencia significa que hay ausencia de contradicción entre dos elementos. La inherencia quiere decir que existe como atributo permanente, tal ligado a ella que no se puede separar.

En las ONL, la RSE debe ser inherente. ¡Debemos aplicarla no sólo por coherencia sino por inherencia!

Nota: Publicado en DiarioResponsable

2 comentaris:

Nathalie López ha dit...

Josep!!

Totalmente de acuerdo, tal y como lo explicasy lo entiendo la coherencia es hacia fuera y la inherencia de adentro hacia afuera.

Un saludote

Josep Maria Canyelles ha dit...

La coherencia tambien puede ser entre elementos internos. Sería equivalente a lo que en lenguage empresarial se dice alinear. Pero si llegas a la RSE o la ética por alineación o por búsqueda de la coherencia, puede que ello sea una prueba de que no es inherente a la empresa. No pasa nada: importa que se llegue a la RSE! Lo que defiendo que es si sólo se llega por coherencia y no se desarrolla como inherencia, puede ser frágil, seria un valor relativo que depende de otros... Hagamos que sea un valor fuerte, constitutivo... Hagamos que otros objetivos tengan que alinearse con la RSE i no al revés.