18.5.08

Las organizaciones de afiliación obligatoria tendrían que ser ejemplares en su responsabilidad social

Cuando la pertenencia a una organización no reviste carácter voluntario sino que es obligada o cuando una organización, en virtud de un especial status promovido por la norma pública, ejerce unos derechos delante de otras personas físicas o jurídicas, tiene que ser muy estricto tanto en el cumplimiento de la ley como en las formas. Siempre se ha considerado así.

Hoy día, estos lógicos requerimientos de sentido común adquieren una formulación nueva: este tipo de organizaciones tienen que ser ejemplares en la gestión de su responsabilidad social ya que de lo contrario pueden perder más rápidamente que nunca su reputación y la legitimidad que les permite actuar bajo tal estatus.

Hoy, la legitimidad ya no viene por una norma emanada del ordenamiento jurídico sino que la autoridad se tiene que fundamentar en las cosas bien hechas y en el correcto ejercicio de la ciudadanía corporativa.

En este sentido, hace tiempo que salen voces críticas a las maneras de hacer de la SGAE (la sociedad general de autores y autoras) e incluso contra su propia existencia. Veamos dos ejemplos de actualidad:

El sindicato CCOO ha criticado la actitud de SGAE por apropiarse del 10 por ciento de la recaudación del Festival Entresures, cuyos beneficios tienen que ser destinados a erradicar la esclavitud en Mauritania. Ver noticia: http://www.lavanguardia.es/lv24h/20080515/53463055801.html

SGAE versus EXGAE, podría ser el anuncio de las futuras batallas que estas dos entidades disputarán en defensa de la cultura y del reconocimiento de los autores, y en más de una ocasión se prevé que en los tribunales. Sobre el tapete dos filosofías completamente opuestas: del Copyright en el Copyleft, pasando por la difusión libre por Internet a los aranceles virtuales en forma de impuestos. En definitiva, son dos modelos antagónicos, dos formas de entender un mismo fin: la defensa y difusión de la cultura. Ver noticia: http://www.elpais.com/articulo/internet/SGAE/tiene/rival/EXGAE/elpeputec/20080516elpepunet_1/Tes
Igual que el SGAE, muchas otras organizaciones sienten cada vez más intensamente una espada de Damocles que puede romper con maneras de hacer tradicionales si no se saben renovar a los nuevos tiempos no sólo mejorando la calidad y adaptándose mecánicamente sino sobresaliendo en su responsabilidad ante de la sociedad en general y sus stakeholders en concreto.

Artículo publicado en Tecnonews