2.4.15

Personas éticas, organizaciones responsables, y un entorno 'Ethic friendly'

[Esta reflexión continua de La ética de la irresponsabilidad corporativa y ¿Portales de la transparencia o liderazgo responsable?]
  • España tiene un sistema fiscal orientado a inducir la corrupción
La última de las preguntas que nos lanzó el moderador Joan Fontrodona fue explícitamente sobre la corrupción, y sobre si se debe a la falta de liderazgo. En mi modesta opinión, el liderazgo responsable es uno de los grandes vectores que pueden favorecer la ética empresarial, si bien este liderazgo y todas las actitudes y valores deben encontrar el contexto de una organización donde la ética y la RSE estén integradas en la gestión, en los procesos y procedimientos, ya que de lo contrario el liderazgo se quedará en el discurso retórico y en una ejemplaridad huérfana.

Y el contexto ético también debe encontrarse en los grupos de interés, comenzando por la agencia tributaria. No es que quiera hacer una desviación del foco, porque es evidente que la corrupción se produce en las relaciones entre la empresa y sus clientes, sean administraciones públicas u otras empresas, pero no podemos dejar de tener presente que el sistema fiscal español está orientado a inducir las malas prácticas y, finalmente, la corrupción. Recuerdo que estoy en nivel de provocación 8... pero la contundencia en la manera de expresarlo viene dada por una realidad dura, donde la inseguridad jurídica de los declarantes es alta y donde el sistema está estructurado para perseguir el contribuyente que puede cometer un error y no el defraudador o delincuente. Y esto no es por casualidad; es una decisión; las cosas son como son y no se aprecia voluntad de cambiarlo. [Véase 14.03.14 Los nuevos retos de la Administración tributaria o Informe sobre la Administración tributaria de Cataluña]

Por último, he expresado que, tal como entiendo que habría que desarrollar un modelo ético sostenible, habría que tener unas personas éticas, unas organizaciones responsables, y un entorno 'Ethic friendly'. Los grupos de interés, clientes, trabajadores, proveedores, el regulador, la Agencia Tributaria, y la opinión pública y la cultura ciudadana deberían contribuir decididamente a crear este entorno de plausabilidad ética. Pero atención: el primer inductor debe ser la organización responsable, es decir, la que diga claramente a todos sus cargos directivos que si no asumen un sentido ético no caben en esta organización. Menos confiar en la ética de las personas y más alinearlas con los valores éticos que la organización haya definido. Y el que no asuma estos valores, a la calle, que de gente tóxica ya están demasiado saturadas algunas organizaciones.